Crítica del nuevo disco de W.A.S.P., Golgotha

Seis años después Babylon, ya tenemos nuevo disco de W.A.S.P, Golgotha, el número quince en su carrera y que ya en el título nos deja claro que poco tiene que ver en concepto con aquel The Last Command, lleno de picardía, sexo y carne para la censura (pienso aquí en “Animal (Fuck Like A Beast)”). Por si no estabas al tanto, el líder de la formación, Blackie Lawless, después de veinte años de locura vital, se pasó al extremo opuesto y se hizo fiel devoto cristiano. Te lo aclaramos ya por las dudas: si esperas encontrar un álbum salvaje y provocativo como en los inicios de W.A.S.P., puedes ir buscando otra cosa.

¿En qué afecta la cristiandad de Blackie en este CD? Básicamente en las letras. Todas tienen el componente religioso presente y giran en torno al concepto de “Jesús te ama”, “Dios es todo lo que necesito y sin ti estoy perdido” o, en definitiva, “Gracias a Dios”. Si no te importa esto, te aconsejo que le des una oportunidad a la música porque merece la pena.

Es difícil encontrar hoy en día un grupo de rock tenga personalidad, pero W.A.S.P es uno de los que la tiene. Ese sonido particular de guitarras y esas armonías que escuchamos en el riff principal de “Scream” ya nos dan una pista, pero en cuanto entra la peculiar voz de Blackie de inmediato identificamos a la banda. Dicho esto, esta canción es el aperitivo perfecto para abrir el disco: directa, melódica y con ritmo. Hard rock marca de la casa.

Otro de los sellos del grupo es el sonido de la batería, totalmente ochentero, comprimido y seco. Se hace especialmente patente en “Last Runaway”, que tiene un ritmo y un groove muy marcado. Aunque el estribillo podría haber sido más comercial, lo cierto es que se te quedará grabado con las escuchas. Enérgico, optimista y bien desarrollado. El trabajo de guitarras es bastante bueno y Blackie canta como nunca.

Un guiño al rock clásico con ese riff inicial de “Shotgun” nos introduce a un tema muy rockero, valga la redundancia. Si eres fan de los W.A.S.P. más desenfadados y directos, este tema te encantará. “Miss You” es una balada muy sentimental que inicia con unos arpeggios de guitarra en limpio y que, poco a poco, va desembocando en una potente power ballad en la que Blackie se sale, cantando muy bien y con mucho feeling. Pocos grupos le tienen tan bien cogido el punto a canciones lentas.

“Fallen Under” es una medio tiempo que empieza relajada y que enseguida adquiere intensidad. Tiene un estribillo repetitivo (de esos que sirven para memorizar bien el nombre de la canción) que te hará tararear la melodía al final. Una vez más, hay que aplaudir la labor de Blackie como vocalista (que parece que no, pero ya tiene casi 60 años y no ha vivido una vida muy decorosa precisamente). De las más pegadizas.

Iron Maiden podría firmar perfectamente el inicio de “Slaves Of The New World Order” hasta que entra la voz lírica de Blackie, que enseguida aclara que estamos escuchando a W.A.S.P.. Me encanta cómo en el estribillo la guitarra y la voz se asocian para enfatizar la melodía principal, muy efectiva y con gancho. Reparte caña como lo hacía la banda en los ochenta y con una crítica en la letra al capitalismo que viene bien para cambiar de tema (ya sabes, Dios). A nivel musical, creo que también está bastante trabajada, con diferentes pasajes que se van combinando con bastante cabeza en los casi ocho minutos que dura. Muy buena.

“Eyes Of My Maker” es otra medio tiempo. En esta el palm mute de las guitarras juega un papel predominante en la estrofa, marcando un groove con mucho carácter. A pesar de la intensidad, se nota que en el estribillo faltaba alguna idea, por lo que acaba resultando en una canción de relleno que no aporta demasiado a lo que ya hemos escuchado en varias ocasiones a lo largo del disco. Vale, hay algún grito heavy por ahí interesante y la parte lenta está muy bien cantada, pero se hace muy cuesta arriba porque resulta algo cansina con ese “Give me a sign” que suena tanto a otras canciones de la banda.

Guitarras acústicas en ristre llega “Hero Of The World” (que sí, que habla de Jesús). Es una balada muy sentida pero que, en lo personal, se me pasa de revoluciones emotivas y se me atraganta demasiado con el mensaje de salvador. Y, para mí, es una pena, porque musicalmente tiene su punto.

“Golgotha” llega para cerrar el álbum con un toque épico y una emotividad que se palpan desde los primeros versos que tan bien canta Blackie. El estribillo reza un contundente y melódico “Jesus, I need you now!” que hará difícil para muchos metaleros (y público en general) cantarla en los conciertos, aunque la composición sea buena. Puede pecar de algo repetitiva de cara al final, pero nadie puede negar que es 100% W.A.S.P.

Conclusión

Anuncios

No me gusta el mensaje cristiano de todas las canciones, que provoca que, en lo personal, se me atragante más de algún tema, pero eso no quita que no haya que reconocer que el grupo suene genial, con unos temas muy bien construidos, que suenan a cañón y a hard rock melódico con carácter. Objetivamente quizá sobre alguna balada y también algún minuto que otro en según qué tema, pero creo que los seguidores de W.A.S.P. estarán contentos de escuchar que su grupo mantiene en muy buena forma su sello musical, especialmente el propio Blackie, que diría que canta mejor que nunca. Eso sí, con unas letras que son lo extremo a salvajes.

Ficha

Discográfica: Napalm Records
Fecha de publicación: 2 de octubre de 2015
Tres canciones fundamentales: “Shotgun”, “Miss You”, “Slaves Of The New World Order”
Escúchalo: en Spotify
Cómpralo: Amazon, iTunes

Portada