Radiografía del Britpop II: el ocaso de los dioses

Todo lo que empieza tiene su fin.

Analizamos el declive del último gran movimiento del rock británico en esta segunda parte de nuestro repaso a la historia del britpop.

Segunda generación del Britpop:

Anuncios

El Britpop era una realidad y todas las bandas del momento querían su porcentaje de fama, dinero y adulación. Las casas discográficas, al descubrir el lucrativo negocio que tenían entre manos, hicieron lo imposible por fichar a nuevos grupos.

Durante el periodo 94/98, Cast, Echobelly, Gene, Menswear, Kula Shaker, Ocean Colour Scene, Ash, Shed Seven, Sleeper, Catatonia, The Verve, Super Furry Animals, Elastica, Supergrass, Placebo,The Bluetones, Manic Street Preachers, The Boo Radleys, Sleeper, Mansun, Lush, Travis, Rialto y These Animal Men, etcétera, invadieron las listas con diferente fortuna comercial. Inesperadamente, surgidos de las cenizas de Madchester, Shaun Ryder y Bez (Happy Mondays) lanzaban It’s Great When You’re Straight… Yeah (Radioactive Records, 1995) como Black Grape que, para sorpresa de todos, alcanzó la cima de los charts.

Videoclip de “Reverend Black Grape”
Si quieres recibir contenido gratis como este en tu móvil, únete a nuestro canal de Telegram:

telegram logo

Tony Blair: la política a favor del Britpop   

Anuncios

Tony Blair, líder del Partido Laborista, intentó utilizar el Britpop para obtener votos entre los jóvenes. En un principio, Noel Gallagher y Damon Albarn, portavoces indiscutibles del movimiento, se sintieron atraídos por su propuesta hasta que, al percibir que pretendía manipularlos en beneficio propio, cesaron de brindarle su apoyo. Jarvis Cocker también fue tentado pero, fiel a su naturaleza desencantada y escéptica, no le concedió la menor oportunidad para conocerle. Tanto Albarn (“Charmless Man”) como Cocker (“Cocaine Socialism”) responderían con sendos temas que criticaban al Nuevo Laborismo.

Tony Blair saludando a Noel Gallagher
Tony Blair saludando a Noel Gallagher

El declive del Britpop

Durante el 11 y el 12 de agosto de 1996, teloneados por The CharlatansOcean Colour SceneThe Chemical BrothersKula ShakerManic Street Preaches y The Prodigy, Oasis brindaron en Knebworth los conciertos más masivos de su carrera. Según la leyenda, habían despachado suficientes entradas como para tocar una semana entera, pero a Noel Gallagher le bastaron dos días para ofrecer su propuesta a las masas que lo idolatraban. Quizá la banda tenía que haberse disuelto después de estas actuaciones irrepetibles. ¿Se podía llegar más lejos después de tocar ante medio millón de personas?      

Primeros síntomas de agotamiento:

Al igual que sucedió con Madchester, el Britpop tenía las horas contadas. Como producto de la época, cuando las bandas que lo representaban alcanzaron la gloria popular y económica, aparecieron las primeras grietas en forma de egos desmesurados, problemas con las drogas y el alcohol, tensiones internas, canciones mediocres y hastío vital. El ejemplo perfecto sería Elastica, banda liderada por Justine Frischmann, influenciada por el punk y la New Wave, no había tenido problema alguno en llegar a los primeros puestos de las listas británicas y estadounidenses gracias a “Sutter”“Line Up” y “Connection”. Demandas por plagio aparte, el éxito instantáneo no sentó bien al grupo: la adicción de Frischmann a la heroína junto al abandono de dos de sus miembros originales desintegró a Elastica que, aunque intentó resucitar a principios del nuevo milenio, no tuvo continuidad.

Elastica
Elastica

Suede se encontraban en la cuerda floja: era necesario un cambio de rumbo, abandonar la oscuridad de los trabajos previos a favor de un enfoque más luminoso y comercial para asegurar su propia supervivencia. Coming Up (Nude, 1996) barrió cualquier duda acerca de la calidad de sus nuevas composiciones: “Trash”, “Beautiful Ones”“Saturday Night” y “Filmstar” fueron himnos destinados a las radiofórmulas que los proyectaron al estrellato internacional.

Videoclip de “Trash”

Quizá te interese nuestro repaso a la discografía de Suede.

Durante la actuación de Michael Jackson en los premios Brit Awards de 1996, Cocker invadió el escenario con la intención de burlarse del egocentrismo del cantante y acaparar las portadas de los tabloides. Aquel acto, aunque le costó una noche en prisión, tuvo el efecto de aumentar el nivel de ventas de los elepés de Pulp. La nueva monarquía del pop se reía en la cara del rey del espectáculo sin vergüenza alguna.

Trainspotting (Danny Boyle, 1996), película de culto basada en la novela de Irvine Welsh que trataba sobre las desventuras de un grupo de heroinómanos de Edimburgo, puede ser considerada la obra definitiva sobre el Britpop. Su banda sonora contaba con temas de BlurPulpElasticaSleeper y Damon Albarn, aparte de Underworld, Leftfield, New Order y Primal Scream. Una radiografía de los noventa a través de temas clásicos de los setenta como “Lust For Life” de Iggy Pop y “Perfect Day”de Lou Reed. ¿Acaso el movimiento no pretendió abrazar el futuro gracias a la exaltación de un pasado glorioso?  

Trainspotting
Trainspotting

La euforia ha desaparecido:

Finalmente, cuando el Britpop agonizaba, gracias al guitarrista Graham CoxonBlur abrazó la música americana de la que tanto había renegado para reinventarse. En Blur (Food, 1997) la influencia de PavementSonic YouthPixies y Dinosaur Jr. resulta innegable. “Beetlebum”“Song 2” y “On Your Own” pertenecen a lo que es considerado su última obra maestra. Por fin el grupo había logrado impactar en las listas de Estados Unidos.

Videoclip de “Song 2”

Be Here Now (Creation, 1997) de Oasis, aunque tuvo ventas iniciales aplastantes no tardó en ser despedazado por los medios tachándolo de sobreproducido, autocomplaciente y con minutaje de sobra. Noel Gallagher tampoco dudó en criticar su propia obra y aniquilar a su hermano Liam como cantante y frontman, algo que tuvo una fuerte repercusión negativa sobre la opinión pública. Ninguno de los sencillos —“D’You Know What I Mean”“Stand By Me” y “All Around The World” —duraba menos de cinco minutos y con el paso de los años fueron desterrados de las presentaciones en directo e incluso del recopilatorio Stop the Clocks (Big Brother, 2006).    

Videoclip de  “D’You Know What I Mean”

Radiohead y The Verve, combos que habían permanecido a la sombra del Britpop, triunfaron con el seminal OK Computer (EMI, 1997) —trabajo vanguardista y paranoide que se convertiría en el modelo musical a seguir durante siglo XXI—, y Urban Hymns (Hut, 1997) —el canto del cisne del movimiento—, con himnos memorables como “Bitter Sweet Symphony”, “The Drugs Don’t Work” y “Lucky Man”. Aunque The Verve había publicado dos discos, fue necesario un sencillo de éxito para convertirse en superestrellas. El videoclip de “Bitter Sweet Symphony” —Richard Ashcroft caminando con arrogancia por una calle mientras choca contra todos aquellos se interponen ante su paso— se ha convertido por derecho propio en uno de los mejores de la historia de la música.  

Videoclip de “Bitter Sweet Symphony”

El ocaso de los dioses:

Jarvis Cocker, harto de ser el centro de atención de los focos, se desmarcó de la corriente dominante con el arriesgado, desolador y experimental This Is Hardcore (Island, 1998). Abanderado por “Help the Aged”“This Is Hardcore” y “A Little Soul”, pese a sus letras crípticas y pesimismo, el álbum tuvo una recepción entusiasta por parte de los medios. La última lúgubre obra maestra —a la altura de A Northern Soul de The Verve (Hut, 1995) y Dog Man Star de Suede— había sido liberada; ahora solo quedaría nostalgia al rememorar los días de gloria. 

Videoclip de “Help the Aged”

EPÍLOGO

Décadas más tarde, en cierta manera, el Britpop continúa presente gracias a bandas como ColdplayKeaneThe LibertinesSnow PatrolThe StrokesKaiser ChiefsArctic MonkeysThe KillersBloc Party o Kasabian. Supervivientes del movimiento como Jarvis CockerBrett AndersonRichard Ashcroft, los hermanos Gallagher y Damon Albarn emprenderían carreras en solitario que, junto algún regreso puntual junto a sus antiguas formaciones, les haría mantenerse vigentes hasta la fecha. 

Manic Street Preachers volvió a la cumbre de las listas inglesas con The Ultra Vivid Lament (Columbia, 2022); Ash publicó Islands (Infectious, 2018); Blur ha anunciado The Ballad of Darren para el 2023; Ocean Colour Scene giró para revivir las glorias de Moseley Shoals (MCA, 1996); Pulp realizan su primer tour en una década en estos momentos; Travis lanzó 10 Songs (BMG, 2020); Kula Shaker continúan en la brecha con 1st Congregational Church of Eternal Love and Free Hugs (Strange F.O.L.K. Records, 2022); Radiohead reeditó el clásico OK Computer con motivo de su vigésimo aniversario; CastSaint EtienneShed Seven, Sleeper y The Boo Radleys también sacaron nuevos elepés; y unos renacidos Suede recorren la carretera promocionando Autofiction (BMG, 2022).

¿Quién dijo que el sueño británico de los noventa había muerto?

Las mejores canciones del Britpop

En esta playlist de Spotify recopilamos los grandes éxitos del Britpop por si te apetece escucharlos. 

Newsletter de Más Decibelios

¡Hey! Tenemos una newsletter gratuita que enviamos cada domingo, así que si quieres estar al tanto de lo que pasa en el mundo de la música, cine y series, déjanos tu correo en el cuadro siguiente y nosotros nos encargamos del resto:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio